- 4 berenjenas grandes.
- 750 gr. de carne picada ( de cerdo, ternera o cordero, o una mezcla de ellas).
- Aceite de oliva.
- 1 cebolla grande picada. 3 ajos picados. 3 tomates rallados.
- 3 cucharadas de pan rallado.
- 2 huevos.
- 200 gr. de requesón.
- Queso rallado.
- ½ l. de leche. 30 gr. de mantequilla y 30 gr. de harina.
- Sal pimienta y nuez moscada.
Lava y corta las berenjenas.
Colócalas en un escurridor y espolvoréalas de sal, de esta manera comenzaran a sudar y a perder parte de su amargor.
En una sartén sofríe, en aceite de oliva, la cebolla picada y los ajos. Cuando esté dorada, añade la carne picada y salpimenta.
Saltéalo durante unos 10 minutos a fuego fuerte. Incorporar los tomates rallados, perejil picado y orégano. Déjalo cocer unos 20 minutos a fuego medio. Retira la sartén del fuego e incorpora el pan rallado y 1 huevo batido.
Haz la bechamel en una cazuela pequeña derritiendo la mantequilla. Añade la harina mezclando bien y entonces incorpora la leche fría de una sola vez. Con un batidor de varillas mezcla hasta que empieza a hervir y quede fina y sin grumos. Pon un poco de sal pimienta y nuez moscada. Déjala a fuego suave unos 15 minutos, vigilando que no se queme. Mézclala con el requesón y 1 huevo.
Lava las berenjenas para retirarle el exceso de sal y cocínalas a la plancha. De esta manera cogerán menos aceite que si las fríes. Si no tienes plancha las puedes hacer en el horno.
Coloca en una bandeja de horno: una capa de berenjenas, una capa de carne, otra de bechamel.
Repetir otra vez todas las capas y acabar con queso rallado. Ponlo en el horno caliente a 200º unos 30 minutos más. Debe quedar gratinado.
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